Desde que se recaban datos, nunca antes habíamos experimentado un frenazo tan drástico en uno de los sectores que forman parte del motor económico de nuestra economía: el turismo.
Andalucía lleva dos años sin poder celebrar eventos como la semana santa en sus diferentes provincias. Sin celebrar ferias como la de abril en Sevilla, o Málaga en agosto. La pandemia también se ha llevado por delante el Carnaval de Cádiz 2021, y el de otras muchas localidades que en febrero se ponen el antifaz y reciben a miles de turistas que dinamizan la economía de nuestras ciudades.
Visitar a familiares y problemas económicos, principales preocupaciones
La imposibilidad de visitar a familiares, los problemas económicos así como las restricciones para desplazarse y viajar; no hacen más que ampliar esa «ola» de incertidumbre que merma la ilusión de un sector, que pone sus esperanzas en el verano de 2021 en el que, con gran parte de la población vacunada; trenes, hoteles y actividades de ocio vuelvan a formar parte de nuestra vida.
Las mayores preocupaciones de los andaluces con el COVID-19
El sector turístico también toca fondo en el resto de España. Madrid, que aglutina el mayor número de eventos de ocio y culturales del país, mantiene en «stand by» espectáculos que han detenido su actividad en la venta de entradas como el musical de «El Rey León». Sin embargo, parques de atracciones como Puy Du Fou en Toledo y Port Aventura World en Tarragona mantienen una actividad bajo mínimos.
El sector del transporte, otro de los perjudicados
Los trenes de la unión europea han perdido más de 26.000 millones de euros en 2020 motivado por la crisis del COVID-19. En España, tras años de crecimiento en la venta de billetes AVE, ya se estaba experimentando una desaceleración en 2019. Se estima en 7.600 millones de euros el impacto que la pandemia ha generado al transporte a través de tren en España.
En España, el sector valora sobre todo la activación de los expedientes de regulación de empleo (ERTE), que en los momentos más duros, durante el primer estado de alarma, llegó a beneficiar a un millón de trabajadores (más de 390.000 a cierre del año), pero son muy críticos con los paquetes de ayudas, porque ninguna de ellas llegará al sector en forma de subvención directa y a fondo perdido.
¿Cuándo recuperaremos la actividad económica en el sector del turismo y del ocio?
El sector da por perdido al menos el 80% del negocio del año, ya que la Semana Santa, la primera gran oleada vacacional del año, representa cerca del 15% de la actividad turística en un ejercicio, se saldó con una facturación cero. Y las perspectivas para la campaña de verano, que supone en torno a 70% de la facturación, son poco esperanzadoras. Todas las esperanzas del sector están puestas en una posible aceleración en cuanto a la vacunación de la población que se supone que coincidirá con la desescalada del confinamiento impuesto por el gobierno.
Sin duda, son tiempos para reinventarse en ambos sectores.